martes, 29 de noviembre de 2016

¡Hola a todos!

Hoy quería hablaros de algo que yo encuentro de vital importancia en ficción, ya sea en una película, en una serie o en un libro: las relaciones románticas.

Imagen de www.static2.hypable.com
¿Os habéis dado cuenta alguna vez de las ridículas relaciones que se nos presentan cada día en ficción? Amor a primera vista, amor tan fuerte que incluso hace daño físico (sentir un enorme vacío en el pecho, por ejemplo), ver a los personajes separados y pensar que les falta algo, que no están completos, o de los que "estuvimos juntos y lo dejamos pero dentro de mí sigo queriéndole por lo que al cabo del tiempo volveré con él/ella aunque no hayamos resuelto los problemas que teníamos". Todo esto está mal y hace que pensemos que es lo más normal también en la vida real. ¡NO! Puedo comprender que cuando rompes con tu pareja, te sientes vacío durante un tiempo, porque seamos sinceros, ha desaparecido una relación en tu vida que era muy importante. Pero que veamos a uno de los personajes que tienen la relación paseando por ahí y sentir que le falta algo, no es normal.

Seguro que conocéis la famosa frase (o dicho, no sé cómo llamarlo) "encontrar tu media naranja". Debo decir que la frase no se refiere a encontrar tu otra mitad física ni a quien te complementa ni nada de eso. Cada uno de nosotros ya somos una persona completa, no existe una mitad nuestra por ahí. Nosotros somos ya uno. A lo que se refiere esta frase, señoras y señores, es a encontrar aquella persona que te comprende y te acepta tan bien como lo haces tú mismo. Tu media naranja es alguien que compartirá tus tonterías, que elogiará tus virtudes y criticará tus defectos y te aceptará tal como eres. Por eso se le llama tu otra mitad: porque esa persona es como tener un espejo y verte reflejado/a en esa persona, pues al estar con esa persona te sientes tú y es, al fin y al cabo, como si estuvieses solo/a, pero aún mejor.

Y todo esto casi no lo veo en las series, películas y libros, lo que creo que es un error monumental de los creadores de contenidos. Me vienen a la mente solamente tres casos en los que la relación romántica está espectacularmente relatada: Stiles y Lydia (en Teen Wolf), Sakura y Shaoran (en Cardcaptor Sakura) y Maron y Chiaki (en Kamikaze Kaito Jeanne). Son relaciones basadas puramente en conocer al otro primero y en que el sentimiento crece y se forma poco a poco sin ningún drama. De hecho, en los animes y en los mangas son muy buenos en esto. Estas relaciones también evocan mucho más en el espectador, porque éste va viendo cómo los personajes empiezan a gustarse, van teniendo cada vez más detalles el uno por el otro, ven el cambio en los ojos cuando se miran... ¡Es tan bonito de ver, una relación así! Y es así como deberíamos vivir nosotros también nuestros romances. ¿Por qué enamorarse a primera vista cuando puedes hacerlo poco a poco? Sentir cómo cambian tus sentimientos, ¡o ni siquiera eso! Encontrarte un día mirando a esa persona y que alguien te pregunte desde cuándo te gusta, y sentirse descolocado/a al principio pero poco a poco darte cuenta que sí que te gusta, y que no sabes siquiera desde cuándo. ¿No es algo precioso de sentir y de ver?

Yo lucho por ver estas relaciones en la ficción, hasta tal punto que me cansan las otras, porque al fin y al cabo son todas iguales. No exploran los sentimientos individuales ni lo que supone para los personajes haber encontrado una persona por la que sienten algo tan diferente y bonito.

¿Qué pensáis vosotros? ¿Estáis de acuerdo conmigo o preferís el otro tipo de relaciones?

Un abrazo.

lunes, 28 de noviembre de 2016


Bueno, la verdad es que no sé cómo empezar este blog. Es difícil introducir algo así, ¿no? ¿Qué se supone que tienes que decir? Podría buscarlo por Google, como todo actualmente, pero no quiero seguir ninguna pauta que me diga exactamente lo que decir.

He decidido abrir este blog para poder compartir las cosas que me gustan y mis opiniones. He de decir que he probado varias veces abrir un blog. Y los tengo abiertos y funcionaron durante un tiempo, pero jamás sentí que fuese yo misma. Escribía y publicaba las cosas del momento para intentar hacerme un hueco en la fama y éxito de esos tipos de bloggers, pero como era de esperar, nunca funcionó. Por eso he decidido empezar este blog sin ninguna meta. Simplemente quiero escribir sobre lo que me apetezca y como me apetezca. Y si me sigues en este viaje, estaré encantada, seas quién seas :)

Así que sí, esa es una mini-introducción. Ni siquiera diré que intentaré escribir una vez a la semana, porque no quiero ir con presiones. Publicaré cuando tenga algo que quiera contar. Puede ser que no haya publicaciones en dos semanas o que haya cuatro entradas en una sola semana. Ya veremos cómo va la cosa :D

Por cierto, se acerca Navidad. Sí, se que estamos aún en noviembre, que falta un mes y bla bla. ¡Pero me gusta tanto esta fiesta! Diciembre es el mejor mes del año. Bueno, uno de los mejores. ¿Pensáis hacer algo interesante esta Navidad? Yo no, no tengo dinero y trabajo, así que me aguantaré xD

¡Adiós!